lunes, 2 de mayo de 2016

4000. Un milagro con enseñanza actual

Iglesia Cristiana Metropolitana
Santiago de Chile

Domingo 01/05/2016

Mensaje: “4000. Un milagro con enseñanza actual”
Texto       : Marcos 8:1-10

Introducción
Esta sección de Marcos continúa con el relato del ministerio del Señor que algunos llaman de Retiro. El capítulo comienza narrando la salida del Señor y sus discípulos a las regiones de Tiro y Sidón. Luego va a la región de Decápolis, rompiendo con esto el límite entre los judíos y los no judíos.
Marcos relata en esta sección dos milagros de Jesús, y los dos son en beneficio de persona son judías, lo que desde ya pre figura la universalidad de las enseñanzas y las obras del Maestro. Sus enseñanzas, su bondad, su compasión no eran exclusivamente para los judíos, era para todos y en esta sección otro milagro que también surge de la compasión de Jesús.
El trato de Jesús con las multitudes dista mucho de lo que se suele ver en el día de hoy, incluso en el mundo protestante. Multitudes que son manipuladas, explotadas, despreciadas y hasta burladas. En este pasaje podemos ver como Jesús mantiene la misma compasión con las multitudes que de manera individual.
Este pasaje se parece mucho al relato de la alimentación de los cinco mil, sin embargo son relatos distintos. La ubicación es otra, la cantidad de personas es otra, los detalles son diferentes.
Por razones didácticas he dividido el texto en tres ideas centrales: Compasión-Responsabilidad-Resultados.
El relato dista al menos 2000 años, no obstante el Espíritu de Dios toma estas palabras y abre nuestros ojos para mostrarnos actitudes y acciones que podemos y debemos tomar como comunidad a fin de cumplir en nuestro tiempo el propósito que la iglesia debe alcanzar.

I. La COMPASIÓN
V.2 “Mi corazón se compadece por la multitud porque ya hace tres días que permanecen conmigo y no tienen qué comer; V.3 y si los despido con hambre a sus casas desfallecerán en el camino, porque algunos de ellos han venido de muy lejos”.
A la base de este milagro está la compasión. Esta palabra quiere decir:
“Sentimiento de pena, de ternura y de identificación ante los males de alguien.”
¿Qué miraba el Señor cuando observaba las multitudes que le causaba esta pena?
Y la obra del Señor surge de esta manera suya de ver la vida. Los evangelios hacen alusión repetidas veces a la compasión de Jesús.
Algunos ejemplos son:
a. Marcos 6:34 Y salió Jesús y vio una gran multitud, y tuvo COMPASIÓN de ellos, porque eran como ovejas que no tenían pastor; y comenzó a enseñarles muchas cosas.
b. Mateo 14:14 Y saliendo Jesús, vio una gran multitud, y tuvo COMPASIÓN de ellos, y sanó a los que de ellos estaban enfermos.
c. Mateo 15:32 Y Jesús, llamando a sus discípulos, dijo: Tengo COMPASIÓN de la gente, porque ya hace tres días que están conmigo, y no tienen qué comer; y enviarlos en ayunas no quiero, no sea que desmayen en el camino.

La motivación frente a las multitudes pueden ser variadas. Un líder frente a la multitud se puede relacionar desde:
-la admiración
-desde el status
-desde el dinero
-desde el deber
El Maestro nos enseña que el vínculo que debe mover a un líder es la compasión.
“La verdadera autoridad espiritual se basa en la compasión. Fue porque Jesús sintió compasión por las ovejas sin pastor que Él se convirtió en nuestro Pastor. Él sintió compasión por los que vivían en la oscuridad, y por lo tanto llegó a ser su Maestro y su Luz.
Sólo tendremos verdadera autoridad espiritual en la medida que tengamos la compasión de Jesús.
No vamos a tener ninguna compasión por aquellos a quienes despreciamos, desestimamos, o rechazamos porque son diferentes. Nunca vamos a tener verdadera autoridad o vamos a poder corregir las doctrinas de otro movimiento o denominación hasta que tengamos el amor de Dios por ese movimiento o denominación. Sin amor no vamos a tener un ministerio genuino. Las murallas que levantamos con nuestros prejuicios se hallan en conflicto con el amor y en conflicto con Dios mismo.”
–Rick Joyner
¿Cómo cultivar la compasión? ¿Se puede aprender la compasión?
1. Orar por las personas
2. Acostumbrarse a no ver lo obvio
3. No enjuiciar a las personas

ILUSTRACIÓN
Una noche bien fría, en la ciudad de Oklahoma en E.E. U.U., llevaron a un hombre temblando ante el juez por haber robado pan. El hombre explicó que su familia estaba muriendo de hambre y necesitaba ese pan. No tenía trabajo. Sin esperanza alguna y todo en su contra, el hombre en su desesperación, agarró el pan y lo escondió debajo de su chaqueta.
Atrapado ahora en su crimen en contra de la sociedad, estaba parado delante del juez quien declaró, "Es necesario que te castigue. No puedo hacer excepciones cuando se trata de la ley. Así que tu castigo será una multa de diez dólares."
Mientras que el juez mirando al hombre desesperado y temblando, metió una mano en el bolsillo en su pantalón debajo de su toga y sacó un billete nuevo de diez dólares y dijo, "Aquí están tus diez dólares para pagar tu multa. Entrégalo inmediatamente a la policía."
"A propósito, continuó el juez, voy a multar a cada persona en esta sala con cincuenta centavos por el simple hecho de vivir en una ciudad donde un hombre tiene que robar una barra de pan para que su familia pueda sobrevivir."
Con esas palabras el alguacil tomó su sombrero y empezó a pasarla y recolectar cincuenta centavos de cada persona en la sala. Luego se giró hacia el ladrón y le entregó $47.50 dólares y con el dinero en la mano, salió del tribunal .

APLICACIÓN
1. El llamado del creyente es a practicar la compasión no el juicio.
2. La compasión es una evidencia objetiva del amor de Dios por el hombre manifestado a través de sus hijos.
3. Las principales necesidades del creyente ya han sido satisfechas, luego hay que centrarse en las necesidades de la multitud.

II. RESPONSABILIDAD.
V.5 Les preguntó, “¿Cuántos panes tenéis?”. Dijeron, “Siete”.
V.6 Así que, mandó a la multitud a que se acomodara en el suelo. Entonces tomó los siete panes y, habiendo dado gracias, los partió y se mantuvo dándolos a sus discípulos para que se los dieran a la gente, y así lo hicieron.
V. 7 También tenían unos pocos pececillos, y después de haber dado gracias por ellos, mandó que también los dieran a la gente.
La responsabilidad está presente en la pregunta del Señor “¿Cuántos panes tenéis? El Señor no está preguntando por lo que no tienen, porque obviamente no tenían lo suficiente para alimentar una multitud, ¿Por qué hace esa pregunta entonces? Porque quiere que los discípulos centren la atención en lo que tienen y que hagan algo con lo que tienen, que se responsabilicen de sus “recursos”.
La compasión debe de la mano con la responsabilidad. Sentir pena sin llegar a la acción es sentimentalismo. Las necesidades de esta multitud eran reales y el Señor responsabiliza a sus discípulos para satisfacerlas.
Lo importante no era la cantidad, sino la actitud. Jesús se encarga, de manera sobrenatural de hacer que los recursos alcancen.

ILUSTRACIÓN
Una señora, paseando, se encuentra de pronto con una niña que en sus brazos llevaba a un niño más pequeño que ella, pero bien gordito. Entonces la señora pensó: “Debe pesar más que ella”.  Se acercó amablemente, y le dijo: ¿Cómo puedes cargar ese niño, no te pesa demasiado?-La niña la miró tranquilamente y sonriendo dijo, -no, es mi hermano.
Cuando la responsabilidad surge de la compasión la carga no pesa

APLICACIÓN

1. Ser responsable significa hacerse cargo de una tarea. Si la compasión nos revela un trabajo para hacer, el siguiente paso es hacerse responsable por ello.
2. Ser responsable es poner la atención en los recursos que se tiene y no en los que no se tienen.
3. Ser responsable es administrar bien los recursos de que se dispone y disponerlos en las manos del Señor para que sus planes y propósitos sean llevados a cabo.

III. RESULTADO
v. 8 Y comieron, y se saciaron; y recogieron de los pedazos que habían sobrado, siete canastas.
v. 9 Eran los que comieron, como cuatro mil; y los despidió.

Como en muchas otras ocasiones la obra divina se conjuga con la obra humana y la voluntad de Dios se lleva a cabo y como también ocurre siempre, Dios toma la iniciativa, él da el primer paso.
Aquí es Jesús quien toma la iniciativa, siente compasión por la gente que había venido a verlo y escucharlo. El desafío, desde la perspectiva humana era imposible, dar de comer a toda esa gente, más de 4000 personas.
Aún así, Jesús busca la responsabilidad de los discípulos en la situación. Ellos miran su entorno, se miran a si mismos y piensan en la imposibilidad de lo que Jesús les pedía, pero cuando muestran lo poco que tienen Jesús lo multiplica y satisface las necesidades de la multitud.

ILUSTRACIÓN
En toda la Escritura se puede observar esta conjugación de lo divino y lo humano:
-Dios entregó la tierra prometida, pero los israelitas tuvieron que pelear.
-Dios sanó a Nahamán pero se tuvo que sumergir en el agua
-Pablo habla de los vasos de barro

APLICACIÓN
1. Los resultados no dependen de los recursos que se tienen, sino de como Dios usa esos recursos para llevar a cabo sus planes.
2. Los resultados son una combinación de la obra divina-humana. Dios que tiene todo el poder y un hombre dispuesto y rendido.
3. Los recursos nunca son suficientes, por eso debemos recurrir una y otra vez al Maestro para pedir que sean multiplicados de manera sobrenatural.

CONCLUSIÓN

Resumen de los tres conceptos:

-COMPASIÓN-RESPONSABILIDAD-RESULTADO
Programa
"Me siento cansado. El trabajo y la fatiga"

domingo, 1 de mayo de 2016

El viaje a Cartagena

El viaje a Cartagena

Pocas veces mi padre nos sacó a veranear cuando éramos niños y una de ellas fue ¡a Cartagena! Cómo no, por supuesto al balneario popular del litoral central. Esa noche nos costó dormir con mi hermana pensando en como sería la playa. No recuerdo que cosas llévamos, sí recuerdo el momento en que nos subimos al tren en la Estación central. Mi papá pago cinco boletos, porque por muchísimos años fuimos cinco: mi papá, mi mamá, mi hermana, mi abuela paterna y yo.
No tengo recuerdos tampoco de ese viaje, solo cosas vagas, un niño que rompe los huevos duros sobre su propia cabeza, otros niños que juegan a las cartas y un chal a cuadros sobre unos asientos verdes y duros, nuestras cabezas asomadas por la ventanilla con el viento dándonos en la cara y nuestra alegría de niños que desbordaba todo.
Los recuerdos un poco más claros comienzan para mi una vez ya instalados en la playa, en una carpa con franjas de colores, ¿rojo y blanco? ¿Verde y blanco?, jugando a pleno sol, cerca de la avenida principal, y muchas otras carpas diseminadas en la arena. Gente escuchando música, comiendo, riéndose. Luego por la noche recuerdo el viento helado que se filtraba por la parte baja, una fogata, una canción de Los Golpes  "Olvidarte nunca" en una radio que sonaba cerca de mi, y yo acostado, sobre una frazada en la arena, cantando, con gorro, comiendo un pan y alrededor la oscuridad sobre la playa chica, el resto de mi familia no se donde estaba.
Por la mañana mi recuerdo infantil se remonta a un juego de pelota con mi papá en la arena, una de las pocas veces que lo vi reírse con ganas y con la panza que lo acompañó toda la vida. El sol como buen aliado reía también con nosotros de las piruletas que mi papá hacía en la arena.

Jugamos un buen rato hasta que mi papá salta cerca de la carpa y comienza a dar pequeños saltos en un solo pie alrededor de nosotros. La risotada fue general, sin embargo mi papá no reía y se tomaba un pie con cara de dolor. Como puede nos explica que apoyó el pie en la arena caliente donde alguien había puesto una tetera. Se acabaron el juego y las vacaciones. Al otro día temprano volvimos de urgencia con mi papá cojeando porque no podía caminar con su pie quemado.

La sanidad de un sordomudo, tres R para recordar

Iglesia Cristiana Metropolitana
Santiago de Chile
Domingo 24 de abril de 2016

Título: La sanidad de un sordomudo, tres R para recordar
Texto: Marcos 7: 31-37

Introducción
Jesús termina su trabajo en Galilea y comienza el período que algunos autores llaman de retiro. Sale de Israel y va a la región de Tiro y Sidón. Baja luego por decápolis y muestra su bondad y poder a personas no judías. Ya hemos visto en el párrafo anterior el milagro con la hija de la mujer sirofenicia. Hoy veremos otro milagro ocurrido al otro lado del Jordán, con un hombre que tampoco es judío, casi una profecía de su ministerio universal.

I. Un ruego. V. 32. “ “Y le trajeron un sordo y tartamudo, y le rogaron que le pusiera la mano encima”
Esto era lo que tal vez ellos habían visto u oído que Jesús hacía cuando sanaba a los enfermos. Ponía las manos sobre ellos.
No tienen dudas acerca del poder y la compasión de Jesús, a pesar de que tal vez no eran judíos, sino gentiles.
Supieron que Jesús estaba en la región e inmediatamente le trajeron a este hombre enfermo, que era sordo y tartamudo.
Mateo, en el capítulo 15, que es el pasaje paralelo dice que no solo le trajeron y rogaron por este hombre sino que trajeron muchos otros enfermos para ser sanados y que Jesús respondió a esos ruego como lo hace aquí en el pasaje con el hombre sordo y tartamudo.
En estos versículos vemos como de conjugan tres elementos para que el milagro se produzca:

1. Un enfermo. Esta condición es universal y ha estado presente en la historia del hombre desde siempre y se manifiesta de mil maneras. Todos nos enfermamos, conocidos y no conocidos, ricos y pobres, niños y adultos. Todo esto ha sido cubierto por el escritor Marcos a lo largo del evangelio. La enfermedad es algo real, existe, no lo podemos obviar y no siempre tiene solución.
Al parecer, la enfermedad o incapacidad de este hombre no tenía solución en ese tiempo y quizás tampoco ahora lo tendría. Frente a esta realidad solo queda un camino, rogar.
2. Gente que cree que Jesús puede hacer el milagro y que practica la fe y que lleva a este hombre a la presencia de Jesús. No sabemos si ya lo habían visto hacer un milagro o si lo habían escuchado de labios de otros, pero creían que era posible y que Jesús podría hacer algo, por lo que no se avergüenzan de rogar por él.
3. Un Jesús poderoso y bondadoso que escucha los ruegos y tiene misericordia de los enfermos que acuden a él.

Ilustración
Spurgeon y la veleta de su amigo con la Inscripciòn Dios es amor. -¿”el amor de Dios es cambiable?- NO dijo el amigo, el amor de Dios es el mismo no importa donde sople el viento”

Aplicación
 Cada cristiano tiene al menos dos trabajos, según este pasaje:
1. Rogar a Jesús por los enfermos físicos y espirituales
2. Llevar a esas personas a un encuentro con el Cristo sanador

II. Una respuesta. V. 33 “Y tomándole aparte de la gente, metió los dedos en la oreja de él, y escupiendo tocó su lengua; y levantando los ojos al cielo, gimió y le dijo: Efata, es decir sé abierto”
 Ante el ruego de las personas la respuesta del Maestro no se deja esperar, pero no hace lo que ellos esperaban que hiciera, sino que, en el ejercicio de su soberanía hace algo distinto.
Jesús no coloca su mano sobre el enfermo como se lo habían solicitado, sino que hace algo inesperado, toma al hombre, le introduce los dedos en los oídos, escupe , tal vez sobre uno de sus dedos y con él toca la lengua del este hombre.
¿Necesitaba Jesús hacer todo esto? No, en el párrafo anterior lo vemos haciendo un milagro a distancia, sin siquiera tener cerca a la persona. No necesitaba tocar a este hombre para sanarlo, pero lo hace, ¿por qué?
Especulemos sobre este acto soberano del Maestro:
1. Quería remarcar sus actos para dejar una enseñanza visible, las orejas y la lengua eran los órganos dañados.
2. Quiso mostrar cercanía con una persona que no era judía y enseñar así la universalidad de su ministerio y de su amor.
3. Jesús escupe en tres ocasiones:
En Marcos 7:33, para sanar a un sordo y tartamudo.
En Marcos 8:23, en Betsaida, con el ciego
En Juan 9:6, cerca del estanque de Siloé, Jesús sanó al ciego de nacimiento.
4. La saliva de Jesús representa algo de sí mismo que se traspasa al sordomudo.
El verso 34. “Gimió” indica la reacción emocional, el dolor que Jesús sintió al ver a a aquel hombre.
“Efata” es una palabra aramea, el idioma materno de Jesús.

Ilustración
Si otro hombre hubiere hecho esto sería extraño y hasta repugnante, pero viniendo de Jesús, aunque no sea comprensible para nosotros tiene un significado especial. Qué extraño suena, pero la saliva de un hombre sobre otro es sinónimo de ofensa, en el caso de Jesús es sanidad.

Aplicación
1. El Señor responde la oración de sus hijos y muestra su amor en favor de quienes se ora.
2. El Señor tiene sus propios métodos para actuar y es un acto de soberanía

III. Una reacción. V. 37 “Y en gran manera se maravillaban, diciendo: Bien lo ha hecho todo; …”

Los ruegos y la fe de los amigos de este hombre y la fe del propio enfermo, sumados a la misericordia de Jesús obraron el milagro y este provocó en las personas que se maravillaran de Jesús.
Él les pidió que o hablaran, pero el asombro y la alegría era mayor que su intención de obediencia y caen en la desobediencia, no pueden dejar de decir lo que Jesús hizo con el hombre sordo mudo o tartamudo.
Con las palabras “bien lo ha hecho todo” nos recuerdan las palabras de Dios en el libro de Génesis “Y vio Dios lo que había hecho y era bueno en gran manera”.
El asombro es la reacción natural del hombre frente a la obra divina, porque esta obra sobrepasa muchas veces la lógica o la razón del hombre.

Aplicación

1. Cuando la intercesión humana y el poder divino se conjugan, la reacción será siempre de asombro.
2. Dios nos sigue maravillando cada vez

Conclusión


Resumen de los tres puntos